D.V. – viernes, 15 de julio de 2022
La movilidad y el transporte sostenible constituyen uno de los objetivos de la Auva 2030 para afianzar el compromiso de Valladolid con el cuidado del medio ambiente
La extensión de las grandes urbes obliga a pensar formas de movilidad que acerquen personas y usos. Hasta ahora este hecho se ha conseguido gracias a la quema de combustibles fósiles, lo cual ha posibilitado y facilitado el acceso a equipamientos, centros de trabajo o espacios de ocio cada vez más alejados. Sin embargo, una ciudad sostenible tiene que lograr rediseñar la movilidad para orientar el urbanismo hacia una localidad de proximidad, desincentivar el uso del vehículo privado y promover medios de transporte sostenibles, como los vehículos eléctricos, bicicletas o el transporte público.
Así, la movilidad y el transporte sostenible constituyen la quinta prioridad estratégica de la Agenda Urbana de Valladolid 2030 (Auva 2030), un plan para dirigir la ciudad hacia la transición ecológica y reducir su impacto ambiental.
En esta línea se busca reducir el uso del vehículo privado, mejorar la oferta de movilidad sostenible adaptada a las necesidades de la ciudadanía, acondicionar las infraestructuras de transporte urbano e interurbano a las nuevas modalidades de movilidad eficientes y promover la accesibilidad universal urbana, particularmente para las personas con movilidad reducida. También adquieren un papel fundamental la mejora de la corresponsabilidad y el protagonismo de la ciudadanía en la gestión de la movilidad eficiente, integrar la planificación urbana y territorial como elemento rector de este tipo de desplazamientos y establecer políticas para reducir la necesidad de movilidad.
Proyectos
Entre las acciones para favorecer la proximidad y la movilidad sostenible de Valladolid, la Auva 2030 contempla la puesta en marcha de la estrategia de adaptación al cambio climático, el plan territorial de protección civil y el plan de movilidad urbana, entre otros planes.
Igualmente, destacan el nuevo servicio de préstamo de bicicletas (actualmente en licitación y cuya gestión asumirá Auvasa a partir de febrero de 2023) y las campañas de educación vial. Este programa se desarrolla a través de diversas actividades formativas que, de forma pedagógica, pretenden influir en la modificación de la movilidad en la ciudad a la vez que promueven hábitos más saludables y respetuosos con el medio ambiente. Además de disminuir los siniestros viales, dando especial importancia a los colectivos más vulnerables como son los jóvenes y las edades más avanzadas, estas campañas tratan de facilitar el asesoramiento y la formación a los colectivos interesados (centros educativos, residencias de mayores, empresas, instituciones, fundaciones, etc.) en cualquiera de los ámbitos en los que la Policía Municipal participa y en los que pueda tener influencia.